Funda para gafas y monedero

Desde que aprendí a hacer monederos con boquilla, estoy enganchadísima. Por varios motivos: porque son estupendos para regalar, porque me sirven para dar salida a las telas que tengo y porque los puedo hacer tranquilamente después de cenar.

Este conjunto está ya con su dueña: mi madre, que dice que ella prefiere seguir con el patchwork.

(y que se niega a coser vestidos para mi hija, la muy malvada...)

¿Te los enseño?

Después de que mi madre viera mi conjunto para el bolso, se quedó tan enamorada, sobre todo de la funda para gafas, que no me quedó más remedio que hacerle otro conjunto para ella.

A estas alturas, tengo ya un buen arsenal de boquillas, porque cada vez que paso por un sitio donde las venden, me traigo al menos un par de ellas.

(No sea que me de por hacer un monedero a las diez de la noche y no tenga materiales)

Las telas, unas en tonos rojos que tenía desde hace tiempo y que he ido usando en otras labores.

Lo primero, un monedero pequeño, con el yoyó con botón que he usado en otras ocasiones y que me encanta como queda.

Y la funda para las gafas...

La tuve que repetir varias veces, porque intentaba hacerlo con la misma técnica que para las boquillas rectangulares y no había manera. Y por muchas vueltas que le doy, sigo sin dar con la clave...

Así que la hice sin "vuelo", que la verdad es que queda bien, sobre todo porque la boquilla era lo suficientemente grande como para que cupieran las gafas.

Y en este caso, el yoyó está hecho con la misma tela que la del monedero, porque así da sensación de conjunto.

La boquilla tiene el cierre en forma de flor, con dos bolas rojas... Y te puedes imaginar que fue este detalle el que determinó el color de las telas a usar, y no al revés...

Lo bueno de estos monederos es que una vez que haces uno, le pierdes el miedo, y ya no puedes parar...

Y el remate del monedero, que se me había olvidado a enseñarte: el charm de "Hecho con amor".

Como te decía antes, lo de los monederos es empezar y no parar...

Ahora estoy haciendo otros pero esta vez con aplicaciones, para que me dure más el hacerlos... Y el pensarlos, y el escoger el dibujo y los trocitos de tela que voy a usar.

(porque yo no tiro ningún trozo de tela, aunque sea minúsculo, porque siempre se puede convertir en el ala de un pajarito o en una flor)

Y así, tendré un buen "arsenal" de regalos preparados, porque las Navidades están a la vuelta de la esquina, y siempre hay personas con las que me gusta tener un detalle.

Además. ya tenemos fecha para la operación de uno de los gemelos, el lunes 30 de noviembre,  y como va a tener que estar un par de días ingresado, estoy preparando un costurero de labores para matar el tiempo, que los días en los hospitales son muy largos. Y además, así lo que cosa tendrá ese recuerdo, el de las horas pasadas con mi "chiquitín"...

Besitos y feliz semana!

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