Por fin luce en la mesa de la terraza mi camino hecho con hexágonos:
Una vez que lo he terminado, he de decir que no me vuelve loca... quizá los hexágonos verdes sobran, no sé... El caso es que no es de las cosas que haya hecho que más me gustan, pero bueno, ya está colocado en la mesa de la terraza, que este año no está muy lucida...
Y no es porque no haga buen tiempo, sino porque hemos tenido otras prioridades...
De cualquier modo, he aprendido la técnica, y para pasar tardes de verano (o de invierno), está bien...
Y aunque este año la terraza no esté en todo su esplendor, hay dos macetas que me han dado una gran alegría: ¡mis hortensias!
Por primera vez en mi vida, voy a tener flores sin tener que haberlas comprado ya florecidas.
Quizá el truco ha estado en no podarlas del todo, o en no esperar nada de ellas... Pero cuando he visto que tenían muchísimos capullitos, me he llevado una gran alegría.
Y mientras termino las camiseta de mi trío (me queda sólo el toque final de una de ellas), le doy vueltas a la colcha para hacer con el jelly-roll y a los detalles del bautizo de Celia...